Noches, de noches. Siete poemas de Andrés Pincheira


Zumbido

Adornan una palabra,
la versan, la llevan
como un amuleto,
la incrustan en su monólogo.
Pero nunca
se dieron cuenta
que una palabra tatuada
en los muros de los nadie,
puede desmembrar el mundo,
puede agitar la historia.


Sanhattan

Hoy
en la oquedad del imaginario,
emergen hombres globulares
que transpiran la matriz de la noche
que hieren la tristeza del día;

ellos trepan a la velocidad de la codicia,
ellos viven en la gravedad de un supuesto.

Seguramente
morirán de una úlcera planetaria
que acostumbra a brincar
sobre el naufragio.


Eso vuelve, volverá

Quizás la vida sea eso,
peldaños puntiagudos
en donde pensar en el futuro
signifique crucificar los ojos,
                                        verlos sangrar

del lado oscuro donde nadie
se atreve a vivir.


Noches, de noches

Esta atmósfera es mía,
tan mía como el puñal de las bocas,
tan mía como el lánguido insomnio
que se acurruca para abrigar
este lugar frío, incalculable y trepidante;
sombrilla hiriente de un paisaje impasible.

Aquí guardo cosas extrañas
como por ejemplo la esfinge de una imagen.


Ojos de roble

Todo cambia
en primera persona, todo.
Incluso llega un momento
en donde sientes el abismo,
la hondura del rostro,
el espejo de la propia vida,
como si el reflejo apuntara
a todas las cicatrices,
y dijera, no huyas.


Sauce

Yo no sé de vidas,
ni de cuántos abrazos
se esconden en las calles.
Si un árbol me preguntara
por el trizado corazón mío,
por esta atmósfera
que apuñala los segundos,
mi historia diría,
que algunos nacen con arrugas
embargadas de miedo
y que la continua lucha
siempre desangra.
Si yo fabricara un instante,
sería de calma,
un calmo reino de huesos,
para que esta silueta ambigua
descansara
junto a un arrozal colmado
de flores extrañas.
Si yo pidiera un deseo,
sería una isla,
un país donde creciera
la certeza de morir tranquilo.


Capítulos

Los que no pueden,
los que no soportan
las esquirlas,
sólo ellos
encontrarán la verdad
en sus cenizas,
la importancia
de haber fraguado
el mundo, el paisaje
en el cabello de los árboles.


Ernesto M. Scotti, "Paisaje español", óleo sobre tema. 80 x 100 cm.

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Andrés Pincheira (La silla del sol, Chile, 1983). Trabajador Social y Magister en Educación Universitaria. Fundó la asociación de escritores hispanos AEHIP en el año 2019. Publicó su primer libro Antrocampo bajo el seudónimo Julián Pudwe, editado por Estudio Editorial Hilatura (Madrid, España) en el año 2020. También participó en la antología Metamorfosis Emocional, publicada en el 2019. Desde el año 2017 crea contenido centrado en la divulgación de poesía en español a través de redes sociales y otras plataformas digitales. Actualmente está trabajando en su próximo libro, el cual dará a luz en el presente año o el siguiente, bajo el título No Sembrarás Árboles.

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